ORATORIOS
El Oratorio trata de ser una experiencia donde el niño vaya, poco a poco aprendiendo la necesidad del silencio interior como actitud fundamental para encontrarse con ellos mismos y con Dios. Una experiencia que incide en lo más profundo del ser humano, en su corazón y que va a disponer al niño para abrir su corazón al Misterio de Dios.